Ya había avisado Mauricio Pellegrino en la rueda de prensa previa al encuentro ante el Sevilla. “Es el partido más importante”, espetaba un técnico que reconocía que el equipo debía ganar sí o sí en el Sánchez-Pizjuán para, al menos, continuar metido en la lucha por la permanencia. Y así se lo tomó el Cádiz CF que, consciente de la necesidad de sumar tres puntos, buscó el tanto por activa y por pasiva y de todas las formas posibles: a veces con juego, otras por individualidades y, cuando no quedaba otra, por puro corazón.
Pellegrino advierte: “Hay que ser cauteloso”
El técnico argentino comparecía en rueda de prensa con su habitual rostro serio y, al mismo tiempo, relajado. “Es muy importante para nosotros porque nos permite tener opciones de luchar hasta el final. Sabíamos que la estadística estaba en nuestra contra, pero ya dije que veníamos con mucha ilusión”, manifestaba un Pellegrino consciente de que el Cádiz nunca había sido capaz de ganar a domicilio al Sevilla y, además, acumulaba más de un año sin lograr tres puntos lejos de tierras gaditanas. “Acertamos en el final en un partido que hemos merecido ganar por más goles. Contento por el vestuario, todavía falta mucho. Tenemos que hacer pleno para tener chance. Hay que ser cauteloso porque el año ha sido tan malo, y difícil, que no nos permite celebrar esta victoria como deberíamos. Queremos terminar bien el año”.
El argentino añadía que “el fútbol es lo que es. Si pudiéramos controlar el timón de los resultados…, pero el equipo siempre ha sacado pecho ante la adversidad y se han ayudado como grupo unido. Estamos empujando con todo lo que tenemos”. Por último, le mandaba un mensaje en forma de petición a la hinchada amarilla. “Que nos sigan acompañando como han hecho siempre. No es un año fácil pero lo bueno es que el Cádiz siempre lucha hasta el final, nunca se rinde”.