Sufrida victoria del Cádiz CF antel Getafe en uno de esos partidos en los que las ocasiones falladas y el dominio de la primera parte dieron paso a la incertidumbre en una segunda mitad donde el Getafe fue mejor pero no pudo con un buen Ledesma. El Cádiz alarga la agonía, gana que es lo que tenía que hacer, y seguirá esperando y peleando hasta el último suspiro de aire que le quede dentro.
Porque los problemas del Cádiz CF se pueden resumir en la falta de gol. El bien preciado del fútbol ha brillado por su ausencia durante toda la temporada en en equipo de Pellegrino que no supo mejorar los registros de sergio y que han terminado de condenarle al descenso. Porque el Cádiz hace muchas cosas bien pero lo de marcar en la portería contraria no es una de ellas. Y así se pudo comprobar en el duelo ante un Getafe sin nada en juego que se limitó a defender gran parte del partido y ante el que el Cádiz abrió la lata mediante un penalti ejecutado por Rubén Alcaraz. No es que sea una mala opción pero no es que el equipo amarillo sea, precisamente, muy frecuentemente ayudado por este tipo de situaciones.
Se notó la necesidad desde el principio con un Cádiz presionando arriba, siendo valiente y buscando siempre la segunda jugada de la mano de un Roger Martí beneficiado por las prolongaciones y dejadas de Chris Ramos, su pareja de baile. Y fue Roger el que dispuso de la mejor ocasión a los apenas veinte minutos en una parada de Soria.
El Getafe, parapetado atrás como de costumbre buscaba una contra que apenas llegaba por la buena presión amarilla. Las constantes acometidas locales no terminaron nunca en un tanto, aún habiéndolo merecido por la pasividad getafense.
De penalti llegó el único tanto amarillo
Pero al Cádiz le salen bien pocas cosas y una de las que no acostumbra a disfrutar este año es del gol, de ahí que la situación no mejorase en exceso con el paso de los minutos hasta el penalti anotado por Alcaraz mediada la primera parte.
El Cádiz hacía lo que tenia que hacer, ganar. Sin embargo, son muchos los que piensan que todo llega tarde y mal, como que las finales fueron antes y no ahora y que va a ser imposible darle la vuelta a lo inevitable. Porque llegará ahora el momento de estirar el chicle o acortarlo según haga o deshaga el Celta de Vigo, pero los números están claramente en contra del Cádiz.
Segunda parte con problemas
La segunda parte fue por el mismo sitio y con casi idéntico resultado. A los de Pellegrino les costaba matar el partido, tenían el dominio pero no materializaban las ocasiones. Y el Getafe ya no se metió tanto atrás, adelantó líneas y comenzó a complicar un poco más las cosas, tanto que el que dominaba la segunda mitad era el equipo de Bordalás.
Había perdonado demasiado el equipo cadista y el cansancio dio paso al miedo y el miedo al dominio de un Getafe que debió estar muerto a esas alturas de partido pero había sobrevivido gracias a la falta de gol de siempre del Cádiz. La incertidumbre se vivió hasta el final con varias intervenciones de Ledesma en un partido sufrido y trabajado que prolonga la agonía cadista que se agarra a la permanencia mientras haya remotas opciones de lograrla.
Ficha técnica:
Cádiz CF: Ledesma, Zaldúa (Iza 63′), Chust, Fali, Javi Hernández; Sobrino (Alejo 63′), Alcaraz, Escalante, Navarro; Roger (Juanmi 63′), Chris Ramos (Maxi 25′).
Getafe CF: Soria, Carmona, Djené (Alderete 46′), Álvarez, Rico, Anglieri (Rodríguez 46′); Maksimovic (Moriba 81′), Milla, Santiago, Greenwood, Mata (Latasa 57′).
Árbitro: Burgos Bengoextea (comité vasco) que amonestó a: Djené, Sobrino, Chust, Óscar Rodriguez, Zaldúa, Alejo.
Goles: 1-0 Alcaraz (35′ penalti);