Cayó derrotado el Cádiz también en Gijón en un partido que tuvo menos de lo que parece, con dos equipos similares pero con distinta eficacia en el área contraria. El Sporting marcó en la segunda que tuvo y se limitó a minimizar al Cádiz que nunca supo cómo hacer verdadero daño a los locales. La sensación amarilla es la de que mereció más pero no supo cómo hacerlo, cayendo derrotado y olvidando las buenas sensaciones de los dos partidos anteriores.
El gol en la primera mitad de Gaspar, tras un saque de esquina, dejó al Cádiz a merced de los locales. Voluntariosos, con ideas pero sin acierto en el último pase, el Cádiz sufrió mucho durante todo el partido, mostrándose espeso en los últimos metros.
La eficacia, la gran diferencia
El encuentro de definió por la eficacia de los locales que tienen un porcentaje enorme de acierto en la portería rival y por eso es uno de los equipos que está en la zona alta. El Cádiz, por contra, tuvo muchos más problemas para generar en este partido ocasiones que sí había generado en otros encuentros.
El penalti en el último minuto, por una mano que podía no haberse pitado y la posterior roja a Paco López por protestar, marcaron el epílogo de un partido insulso en el que nadie hizo más que el otro pero se llevó la derrota, el de siempre, un Cádiz que sigue metido en problemas.
Ficha técnica:
Sporting: Yáñez, Rosas, Pier, Sánchez, García; Gelabert (Martín 46′), Olaetxea, Méndez; Dubasin (Caicedo 88′), Otero (Campuzano 70′), Campos (Queipo 70′).
Cádiz CF: David Gil; Iza (Ontiveros 6′), Kovácevic, Chust, Matos (De la Rosa 77′): Alejo, Kouamé, Alcaraz (Escalante 78′), Brian; Carlos Fernández, Chris Ramos (Roger 72′).
Árbitro: Eder Mallo Fernández (comité castellano leonés) que amonestó a Chust, Dubasin, Sánchez, Pablo García. Y expulsó a Paco López por protestar.
Goles: 1-0 27′ Gaspar; 2-0 Campu 92′.