El Cádiz Club de Fútbol volvía en la mañana del miércoles a los entrenamientos para preparar el próximo encuentro ante el CD Castellón. Tras el empate agónico frente al Tenerife, los de Paco López quieren conseguir de una vez por todas la primera victoria del campeonato para afianzar el nuevo proyecto del técnico valenciano. Para ello, el grupo se ha incorporado al trabajo. Eso sí, con ausencias importantes y la de Iván Alejo como la más sorprendente.
El extremo vallisoletano fue, junto a Tomás Alarcón, el mejor futbolista del Cádiz ante el Tenerife. Su entrada desde el banquillo supuso un punto de inflexión en el partido y de sus botas nacieron las asistencias para los goles del empate. Reactivó al equipo con su atrevimiento y energía, se hizo dueño del costado derecho y volvió loco a su marca para salvar un punto in extremis y evitar una nueva debacle en el club amarillo. Sin embargo, el jugador se ha ausentado de la sesión de entrenamiento y se ha encargado de aclararlo a través de su cuenta de Instagram: «Fiel creyente del que todo pasa por algo. Desafortunadamente una pequeña lesión me hace tener que parar: limpiar la cabeza y volver a ayudar a mi equipo. Todos juntos».
Una mala noticia para Paco López, que había encontrado en el pucelano la verticalidad que le suele faltar al equipo en estas primeras jornadas. Además, Carlos Fernández, Óscar Melendo, Luis Hernández y Roger Martí tampoco se han ejercitado con el grupo. Por su parte, Rominigue Kouamé continúa apartado por su falta de profesionalidad y aún no se descarta una posible salida a algún campeonato cuyo mercado aún no haya cerrado.