Gaizka Garitano mantiene intacto su invicto como entrenador del Cádiz CF. Seis partidos, tres victorias y tres empates. Una dinámica tremendamente positiva que ilusiona al cadismo y que, tras el triunfo sobre el CD Mirandés, crea una corriente de optimismo clasificatorio no apto para los más prudentes. Sea como sea, la realidad es que el técnico vasco le ha cambiado la imagen por completo al cuadro amarillo. Mario Climent, Rubén Sobrino y Víctor Chust fueron los autores de los tantos locales.
Tras el encuentro, Garitano hizo un balance del partido en rueda de prensa. «Ha sido un partido difícil contra un gran rival, un equipazo. Se nos ha puesto el partido bien, hemos salido muy fuertes y hemos hecho dos goles. Luego ellos han apretado, y encima se nos ha puesto más difícil con diez todo el segundo tiempo. Hemos sabido sufrir y estar ordenados, pero el tercer gol nos ha dado la victoria. Felicitar a los futbolistas porque ante un rival buenísimo, el equipo ha sabido sufrir, estar ordenado y ganar un partido que se había puesto difícil porque hemos estado con diez jugadores mucho tiempo», explicaba.
